Por razones de seguridad, todas las entradas son personales.
Para asistir a los dos días de la conferencia, es necesario comprar dos entradas por separado.
El 29 de mayo en la AFD, de las 13h30 a las 18h30
El 30 de mayo en el Palais du Luxembourg, de las 14h00 a las 20h00
El coloquio "Sistemas de protección social, políticas públicas y retos sociales de la edad en Europa, América Latina y el Caribe" está organizado por el Institut des Amériques (IdA), la Fundación Unión Europea-América Latina y Caribe (UE-ALC), la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), Expertise France y el Ministerio francés de Europa y Asuntos Exteriores. También beneficia del patrocinio del Presidente del Senado francés. Este evento forma parte de las Semanas de América Latina y el Caribe (SALC 2024).
Coordinación científica:
Por razones de seguridad, todas las entradas son personales.
Para asistir a los dos días de la conferencia, es necesario comprar dos entradas por separado.
La mayoría de los países de América Latina, el Caribe y Europa experimentan un proceso acelerado de envejecimiento demográfico, caracterizado por un aumento de la proporción de personas mayores y muy mayores en la población. Según el informe Cepal 2022, la región de América Latina y el Caribe registra un proceso de envejecimiento más rápido que otras regiones del mundo: en 1950, las personas de 60 años o más representaban el 5,2% de la población total; en 2022, esta cifra ascenderá al 13,4%, proporción que se espera alcance el 16,5% en 2030. En Europa, el envejecimiento de la población ha sido más precoz y, según la Comisión Europea, en 2020 el 20% de la población ya supera los 60 años.
El envejecimiento demográfico es el resultado de dinámicas que entrelazan el decrecimiento de la fecundidad y la mortalidad a edades más tempranas (envejecimiento en la base de la pirámide), el aumento de la longevidad o el retraso de la edad media a la que mueren las personas mayores (envejecimiento en la cúspide) y el saldo migratorio. La emigración de adultos y jóvenes ha desempeñado un papel importante en el envejecimiento de la población en algunos países de América Latina y el Caribe, mientras que en Europa del Oeste la inmigración tiende a frenar el proceso de envejecimiento, contribuyendo a la renovación de la población joven y adulta y, por tanto, a la natalidad.
La esperanza de vida para ambos sexos ha aumentado considerablemente, pasando de 48,6 años en 1950 a 75,1 años en 2019 en América Latina y el Caribe, y de 62,8 a 79,1 años en Europa. A medida que las personas envejecen, la feminización de la tercera edad se acentúa, debido a la mayor longevidad de las mujeres, que sin embargo viven más años con mala salud. A pesar del retroceso causado por el impacto de la pandemia de COVID-19, la esperanza de vida debería seguir aumentando en el futuro en ambas regiones. Mientras que los "jóvenes-mayores" participan regularmente en actividades familiares y sociales sumamente útiles, el creciente número de personas muy mayores, que tienen más probabilidades de sufrir una reducción de su autonomía y afecciones crónicas o degenerativas, plantea un reto importante a las políticas públicas nacionales y regionales de protección social y a los dispositivos locales y familiares de apoyo e inclusión social.
El proceso de envejecimiento abarca multitud de situaciones, y los promedios regionales ocultan marcadas diferencias entre países, tanto en lo que se refiere a la rapidez de la transición de una sociedad joven a una envejecida como a la intensidad del proceso. La situación tampoco es homogénea a escala más individual o local, por las desigualdades en el aumento de la esperanza de vida de las personas mayores, su estado de salud (especialmente en detrimento de las mujeres y los colectivos más pobres o expuestos a riesgos medioambientales), sus condiciones materiales de vida (vivienda, alimentación, condiciones de empleo, acceso a servicios públicos de calidad, territorio) y el apoyo que reciben de su entorno social y familiar, que pueden aumentar su vulnerabilidad o contribuir a reducirla.
A nivel individual, el envejecimiento va acompañado de un aumento de la demanda de prestaciones sociales, atención sanitaria y asistencia, lo que plantea las cuestiones de cómo cubrir el riesgo de supervivencia hasta la vejez y el nivel de protección que debe proporcionarse (mesa redonda 1) y cómo organizar la atención a las personas que pierden su independencia (mesa redonda 2). Considerado a nivel poblacional, el envejecimiento plantea cuestiones sobre la sostenibilidad financiera de las políticas públicas destinadas a las personas mayores, pero también sobre el ordenamiento territorial y el mantenimiento de la cohesión social (mesa redonda 3).
29 de mayo – Agencia Francesa de Desarrollo
Mesa redonda 1 - Protección y cobertura social
Desde los años noventa del siglo XX, los sistemas de protección social establecidos históricamente en ambas regiones han sido objeto de importantes reformas. Aunque la ampliación de la cobertura social y el aumento del nivel de protección han sido objetivos comunes para ambas regiones, aún queda mucho por hacer. En América Latina y el Caribe, se estima que el 40% de los trabajadores y sus familias no se benefician de ninguna forma de protección social, debido a las características de los mercados laborales, en particular en detrimento de las mujeres. En Europa, las personas están casi totalmente cubiertas, pero hay diferencias significativas en el nivel de protección. Las mujeres, por ejemplo, reciben una pensión media de jubilación un 39% inferior a la de los hombres. Las estrategias de universalización también se han aplicado a costa de reducir los niveles de protección y fragmentar la cobertura. Los productos de seguros privados con ventajas fiscales agravan las desigualdades en los niveles de protección. Además, a pesar de las reformas para hacer más solventes los sistemas de protección social, estos sistemas de protección tienen un rendimiento institucional limitado en términos de gestión, métodos de financiación inestables y mantienen fuertes desigualdades, sobre todo en términos de género y origen étnico: las mujeres mayores de clase trabajadora, especialmente las pertenecientes a minorías étnicas, siguen siendo las más vulnerables.
Esta mesa redonda debatirá los avances y retos de las políticas públicas en materia de ampliación de la cobertura social de las personas mayores, ya sea contributiva (pensiones de jubilación de pago) o financiada con cargo a los presupuestos públicos (prestaciones sociales mínimas, servicios específicos y otras prestaciones ofrecidas por las autoridades locales).
Mesa redonda 2 - Cuidados y salud pública
En los países objeto de este coloquio, la organización de la provisión de cuidados (care) ha emergido en los últimos años como una cuestión pública, especialmente en los países más afectados por el envejecimiento demográfico y en los que cuentan con políticas sociales más avanzadas, ya sean latinoamericanos y caribeños o europeos. A pesar del reconocimiento, más o menos afirmado, de la corresponsabilidad de las instituciones públicas en la satisfacción de las necesidades de cuidado asociadas al envejecimiento, éstas siguen en gran medida relegadas a las responsabilidades familiares o satisfechas por la dinámica desigual del mercado. La evolución de las políticas públicas, el grado de consenso político y las modalidades de financiación aplicadas revelan grandes disparidades. Estas disparidades se refieren, en particular, a la capacidad real de las familias -y especialmente de las mujeres- para compartir las responsabilidades de los cuidados con los profesionales y las instituciones públicas. También afectan a la regulación de la comercialización de los cuidados de larga duración mediante sistemas de seguros privados o sociales y subvenciones a la demanda o a la oferta, así como a la profesionalización y la protección social de los prestadores de cuidados.
Estas políticas o programas públicos se inscriben en sistemas sanitarios cuya organización, calidad y accesibilidad para los distintos grupos sociales y económicos varían de un país a otro (servicios sanitarios públicos, privatización y comercialización, prestaciones vinculadas a regímenes de seguros sociales o privados, programas destinados a categorías sociales vulnerables). Cuanto más difícil o exclusivo es el acceso a servicios sanitarios de calidad, mayor es la carga que soportan las familias. Las consideraciones de género y de origen étnico están en el centro de la cuestión de la asistencia sanitaria (curas) y de la asistencia personal (cuidados), dado que las mujeres viven más años que los hombres, pero más años con mala salud; que son las principales proveedoras de cuidados en el marco familiar e institucional; y que las mujeres de origen extranjero, o marcadas por su origen étnico, constituyen la mayor parte de la mano de obra profesional o informal de las cuidadoras.
Esta mesa redonda analizará cómo se organiza socialmente y económicamente la prestación de asistencia sanitaria (cura) y cuidados personales (atención) a las personas que pierden su autonomía, en la intersección de las políticas públicas, el mercado y las normas sociales, morales y de género imperantes en las familias y las sociedades.
30 de mayo – Palais du Luxembourg
Mesa redonda 3 - Ciudadanía, cohesión social y territorios
El ámbito local desempeña un papel crucial en la vida cotidiana de las personas mayores, tanto si viven en zonas urbanas como rurales. Si bien la cohabitación intergeneracional sigue siendo un modelo de organización de los hogares, tiende a disminuir y, en todos los países cubiertos por esta conferencia, hay una proporción creciente de personas mayores que viven solas o en hogares compuestos exclusivamente por personas mayores.
Así pues, el reto de su inclusión social y de su ciudadanía a nivel territorial se plantea cada vez más independientemente de la mediación de las familias intergeneracionales. Las nuevas generaciones de personas mayores son a menudo más independientes, mejor formadas y más comprometidas que sus predecesoras, a pesar de que muchas de ellas se ven a menudo atrapadas en una vida cotidiana difícil y en las exigencias familiares (participación en las tareas domésticas y de cuidados).
Es ante todo en su proximidad, en sus barrios y en su entorno donde estas personas satisfacen sus necesidades de abastecimiento, donde encuentran recursos relacionales y solidaridad o sufren la soledad, donde se desplazan en condiciones de comodidad o de inseguridad, donde se sienten incluidas y consideradas o tropiezan con discriminaciones explícitas o negligentes, y donde disfrutan de servicios públicos de calidad o padecen su insuficiencia y lejanía. Es también a esta escala espacial que consiguen mantener una participación cívica activa, que se implican en colectivos y asociaciones, que desarrollan actividades
integradoras e intergeneracionales, y que se benefician de servicios y recursos adecuados ofrecidos por las organizaciones de la sociedad civil y las políticas públicas nacionales o locales. Se han puesto en marcha numerosas iniciativas para integrar, socializar y mantener la ciudadanía de las personas mayores, muchas de ellas generadas por su movilización y compromiso, ya sea formalizadas en esquemas como Ciudades Amigables con las Personas Mayores o políticas locales, o permaneciendo informales en prácticas sociales arraigadas en culturas locales o movimientos solidarios deliberados.
Esta mesa redonda pondrá de relieve los problemas sociales y de ciudadanía que plantean el envejecimiento y la presencia de las personas mayores en el ámbito local, y destacará las iniciativas y proyectos que están surgiendo para abordarlos.
Conferencia de cierre
Mesa redonda moderada por: Alfonso Martinez Saenz
Panelistas :
- Anne-Marie GUILLEMARD, Profesora emérita de Sociología, Universidad París Ciudad, Investigadora en el Centre d'Etude des Mouvements Sociaux, EHESS/CNRS/INSERM
- Anne LAVIGNE, Profesora de Economía en la Universidad de Orleans
- Yorleny LEÓN MARCHENA, Ministra de Desarrollo Humano e Inclusión Social
- Anthony MARINO, Jefe de la Oficina de Pensiones de la DREES
- Jeannette SÁNCHEZ, Representante del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, CAF, en Bolivia
Argumentación:
Desde los años noventa del siglo XX, los sistemas de protección social establecidos históricamente en ambas regiones han sido objeto de importantes reformas. Aunque la ampliación de la cobertura social y el aumento del nivel de protección han sido objetivos comunes para ambas regiones, aún queda mucho por hacer. En América Latina y el Caribe, se estima que el 40% de los trabajadores y sus familias no se benefician de ninguna forma de protección social, debido a las características de los mercados laborales, en particular en detrimento de las mujeres. En Europa, las personas están casi totalmente cubiertas, pero hay diferencias significativas en el nivel de protección. Las mujeres, por ejemplo, reciben una pensión media de jubilación un 39% inferior a la de los hombres. Las estrategias de universalización también se han aplicado a costa de reducir los niveles de protección y fragmentar la cobertura. Los productos de seguros privados con ventajas fiscales agravan las desigualdades en los niveles de protección. Además, a pesar de las reformas para hacer más solventes los sistemas de protección social, estos sistemas de protección tienen un rendimiento institucional limitado en términos de gestión, métodos de financiación inestables y mantienen fuertes desigualdades, sobre todo en términos de género y origen étnico: las mujeres mayores de clase trabajadora, especialmente las pertenecientes a minorías étnicas, siguen siendo las más vulnerables.
Esta mesa redonda debatirá los avances y retos de las políticas públicas en materia de ampliación de la cobertura social de las personas mayores, ya sea contributiva (pensiones de jubilación de pago) o financiada con cargo a los presupuestos públicos (prestaciones sociales mínimas, servicios específicos y otras prestaciones ofrecidas por las autoridades locales).
Mesa redonda moderada por: Olivier Giraud
Los panelistas:
- Merike BLOFIELD, Profesora de Ciencias Políticas en la Universidad de Hamburgo, especializada en temas de salud y política social.
- Alexandre FARNAULT, Subdirector de Abastecimiento, Caja Nacional de solidaridad para la autonomía (CNSA France)
- Alfredo GONZALEZ REYES, politólogo y ex secretario ejecutivo del Consejo Nacional para la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible del gobierno mexicano.
- Karolin KILLMEIER, Analista en la Dirección de Empleo, Trabajo y Asuntos Sociales de la OCDE.
Argumentación:
En los países objeto de este coloquio, la organización de la provisión de cuidados (care) ha emergido en los últimos años como una cuestión pública, especialmente en los países más afectados por el envejecimiento demográfico y en los que cuentan con políticas sociales más avanzadas, ya sean latinoamericanos y caribeños o europeos. A pesar del reconocimiento, más o menos afirmado, de la corresponsabilidad de las instituciones públicas en la satisfacción de las necesidades de cuidado asociadas al envejecimiento, éstas siguen en gran medida relegadas a las responsabilidades familiares o satisfechas por la dinámica desigual del mercado. La evolución de las políticas públicas, el grado de consenso político y las modalidades de financiación aplicadas revelan grandes disparidades. Estas disparidades se refieren, en particular, a la capacidad real de las familias -y especialmente de las mujeres- para compartir las responsabilidades de los cuidados con los profesionales y las instituciones públicas. También afectan a la regulación de la comercialización de los cuidados de larga duración mediante sistemas de seguros privados o sociales y subvenciones a la demanda o a la oferta, así como a la profesionalización y la protección social de los prestadores de cuidados.
Estas políticas o programas públicos se inscriben en sistemas sanitarios cuya organización, calidad y accesibilidad para los distintos grupos sociales y económicos varían de un país a otro (servicios sanitarios públicos, privatización y comercialización, prestaciones vinculadas a regímenes de seguros sociales o privados, programas destinados a categorías sociales vulnerables). Cuanto más difícil o exclusivo es el acceso a servicios sanitarios de calidad, mayor es la carga que soportan las familias. Las consideraciones de género y de origen étnico están en el centro de la cuestión de la asistencia sanitaria (curas) y de la asistencia personal (cuidados), dado que las mujeres viven más años que los hombres, pero más años con mala salud; que son las principales proveedoras de cuidados en el marco familiar e institucional; y que las mujeres de origen extranjero, o marcadas por su origen étnico, constituyen la mayor parte de la mano de obra profesional o informal de las cuidadoras.
Esta mesa redonda analizará cómo se organiza socialmente y económicamente la prestación de asistencia sanitaria (cura) y cuidados personales (atención) a las personas que pierden su autonomía, en la intersección de las políticas públicas, el mercado y las normas sociales, morales y de género imperantes en las familias y las sociedades.
Mesa redonda moderada por: Isabelle Chariglione
Los panelistas:
- Barbara BRINGUIER, Directora Regional Internacional y de Ultramar de Les Petits Frères des Pauvres
- Sandra HUENCHUAN, Especialista en el tema de envejecimiento de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de las Naciones Unidas, Sede subregional en México.
- Pierre-Olivier LEFEBVRE, Delegado Général du Réseau Francophone des Villes Amies des Aînés (Red Francófona de Ciudades Amigables con las Personas Mayores)
- Diana MEJIA, Representante del programa gubernamental Familias de cariño en la República Dominicana
Argumentación:
El ámbito local desempeña un papel crucial en la vida cotidiana de las personas mayores, tanto si viven en zonas urbanas como rurales. Si bien la cohabitación intergeneracional sigue siendo un modelo de organización de los hogares, tiende a disminuir y, en todos los países cubiertos por esta conferencia, hay una proporción creciente de personas mayores que viven solas o en hogares compuestos exclusivamente por personas mayores.
Así pues, el reto de su inclusión social y de su ciudadanía a nivel territorial se plantea cada vez más independientemente de la mediación de las familias intergeneracionales. Las nuevas generaciones de personas mayores son a menudo más independientes, mejor formadas y más comprometidas que sus predecesoras, a pesar de que muchas de ellas se ven a menudo atrapadas en una vida cotidiana difícil y en las exigencias familiares (participación en las tareas domésticas y de cuidados).
Es ante todo en su proximidad, en sus barrios y en su entorno donde estas personas satisfacen sus necesidades de abastecimiento, donde encuentran recursos relacionales y solidaridad o sufren la soledad, donde se desplazan en condiciones de comodidad o de inseguridad, donde se sienten incluidas y consideradas o tropiezan con discriminaciones explícitas o negligentes, y donde disfrutan de servicios públicos de calidad o padecen su insuficiencia y lejanía. Es también a esta escala espacial que consiguen mantener una participación cívica activa, que se implican en colectivos y asociaciones, que desarrollan actividades integradoras e intergeneracionales, y que se benefician de servicios y recursos adecuados ofrecidos por las organizaciones de la sociedad civil y las políticas públicas nacionales o locales. Se han puesto en marcha numerosas iniciativas para integrar, socializar y mantener la ciudadanía de las personas mayores, muchas de ellas generadas por su movilización y compromiso, ya sea formalizadas en esquemas como Ciudades Amigables con las Personas Mayores o políticas locales, o permaneciendo informales en prácticas sociales arraigadas en culturas locales o movimientos solidarios deliberados.
Esta mesa redonda pondrá de relieve los problemas sociales y de ciudadanía que plantean el envejecimiento y la presencia de las personas mayores en el ámbito local, y destacará las iniciativas y proyectos que están surgiendo para abordarlos.